viva el mole de guajolote
A mediados de la década de los veinte del siglo XX se consolida el estridentismo como corriente estética, instalando a México en el escenario de las vanguardias, de la búsqueda colectiva de renovación del arte y la propuesta de una estética más incluyente y contemporánea. Aunque la primera manifestación del movimiento estridentista,
Al estridentismo están ligados artistas plásticos y literatos cuyas relaciones políticas permitieron el auge del movimiento en Jalapa, capital del estado de Veracruz gobernado por el general Heriberto Jara, hombre revolucionario vinculado a la lucha campesina y proletaria desde una izquierda cercana al comunismo. Maples Arce participó en el gobierno del general de manera activa lo que significó para el estridentismo un vuelco hacia el compromiso social, evidente en sus proclamas y en la obra de los estridentistas que plasman en sus poemas odas obreras y exaltan muy a su manera los triunfos comunistas en Europa.
Aunque el estridentismo no ha trascendido como un importante movimiento por las obras generadas, su importancia no sólo radica en ser la primera vanguardia mexicana. Llamó la atención sobre problemas sustanciales del arte y la literatura, planteó la necesidad de renovar los discursos estéticos y participar del progreso tecnológico y científico a la mayor cantidad de personas posible, no para instalarse en el futuro, sino para transformar el ahora:
Nada de retrospección. Nada de futurismo. Todo el mundo, allí, quieto, iluminado maravillosamente por el vértice estupendo del minuto presente; atalayado en el prodigio de su emoción inconfundible y única y sensorialmente electrolizado en el “yo” superatista, vertical sobre el instante meridiano, siempre el mismo, y renovado siempre.
el primer documento en que se fijan las bases estéticas del estridentismo es
Cuando los medios expresionistas son inhábiles o insuficientes para traducir nuestras emociones personales – única y elemental finalidad estética – es necesario, y esto contra toda la fuerza estacionaria y afirmaciones rastacueras de la crítica oficial, cortar la corriente y desnucar los “switchs”.
Más allá del terreno artístico, el Comprimido Estridentista de Maples Arce se propone seriamente escandalizar a la sociedad estática de provincia con frases como “Muera el cura Hidalgo” y “Se prohíbe fijar anuncios” cuando el manifiesto era colocado en las calles de manera clandestina.
En catorce puntos Maples Arce reacciona ante el pasado de manera radical adhiriéndose a la afirmación del futurista italiano Marinetti: “Un automóvil en movimiento es más bello que
Este primer manifiesto finaliza con una lista de autores considerados por Maples Arce como “De Vanguardia”, allí encontramos a algunos de los más importantes y revolucionarios artistas de finales del siglo XIX y principios del XX; lo mismo a Tristán Tzara que a Giorgio de Chirico o Piet Mondrian, Kandinsky, Marinetti, Apollinaire y Picasso por lo que respecta a Europa, pues el autor alcanza ya a reconocer a varios latinoamericanos que participarían de una u otra forma en las rebeliones artísticas del siglo pasado: Diego M. Rivera, José Juan Tablada, Alfonso Reyes, Silvestre Revueltas, Vicente Huidobro.
Una de las características de los manifiestos del estridentismo es el humor burlesco con el que llaman la atención hacia sus propuestas, es quizá este segundo manifiesto el que de manera más jocosa que no menos mordaz vocifera contra el anquilosamiento social en que se encuentran la poesía y el arte en general.
La arenga está dirigida a los jóvenes intelectuales del Estado de Puebla a quienes se exhorta a crear el “arte nuevo, juvenil, entusiasta y palpitante” de una forma por demás retórica en la que sin embargo se alcanza a comprender los postulados estéticos de espiritualización de la creación estética. Se mantiene la línea a favor de renovar los temas de la literatura, el “Cosmopoliticémonos” del primer manifiesto se retoma aquí: “La exaltación del tematismo sugerente de las máquinas, las explosiones obreriles que se estrellan los espejos de los días subvertidos. Vivir emocionalmente. Palpitar con la hélice del tiempo."
Es difícil precisar los alcances de un movimiento artístico, pues la evolución sucede de tan distintas formas que las influencias en movimientos posteriores no son del todo notorias. Sin embargo yo me quedo con el estridentismo como el reactor que permitió desde su radicalismo el surgimiento de formas más experimentales y libres en la poesía mexicana de principios del XX. Sin ser los únicos precursores y promotores de la vanguardia los estridentistas dieron cauce a formas poéticas que anunciaban una nueva época para la sociedad: las ciudades como motores del mundo, con todo el ruido que aquello significa.
¿A poco no? El autor es Lucho Argaín, interpreta su Sonora de Dinamita y, no es de los veinte, ni de los treinta, eran los meritos ochenta cuando comenzó a sonar en Tepito y en el Peñón de los Baños.
Fuentes:
Manuel Maples Arce, Germán List Arzubide, et al., “Manifiesto Estridentista Núm.
Mario De Micheli, Las vanguardias artísticas del siglo XX, 2ª ed.,trad. Ángel Sánchez- Guijón, Alianza Forma, Madrid, 2002.
Manuel Maples Arce, “Hoja Actual No.
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